miércoles, 2 de octubre de 2013

Mi día susceptible.

¿Qué sentís los días en que no dormís? 

¿Pensas claramente o se te confunde con lo del día anterior?  

La susceptibilidad varía según la persona, el carácter y el momento.
 Mi pálida tez indica mi estado de ánimo, aunque no lo crean. A veces no tengo color, soy un cadáver y por dentro el color que mi sangre posee  empieza a notarse cuando pienso en ahogarme. Mis ojos tienen un peso que por la noche no tenían. Mis pensamientos cambian de parecer tan fácilmente a comparación de otros días. Mi personalidad que tan fuerte parecía se desvanece y me doy pena a mí misma. 


¿Qué tanto puede afectarte unas horas en que no soñaste en escaparte? Esas horas parecen eternas. 

Cuando veo su cara es tan brillante, sonriente, vivo y tan fuerte.  Siempre pienso en esa imagen cuando la noche me abraza, pero yo no a ella. Sos mi viva imagen que perdí en mi piel. Te pediría que me devuelvas color a mis días pero al parecer te ocupas del color de otros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario